Tom Jones, un hombre de verdad

¡Paren las máquinas! El Tigre de Gales ha vuelto y por la puerta grande. Quien creía que Madonna es la única que sabe reinventarse una y otra vez en este negocio para sobrevivir está muy equivocado, Tom Jones da una nueva vuelta de tuerca a su carrera para lograr de nuevo el éxito con '24 hours'.

La carrera de Tom Jones ha estado llena de altibajos. Sus últimos discos sólo han sido editados en Europa y en Estados Unidos, donde triunfó en los 70, y hace casi 15 años que no sabían nada de él.

Atrás quedan décadas gloriosas donde arrasó como sex symbol con la camisa abierta hasta la cintura, pelambrera en el pecho, cinturones con hebillas gigantes y contoneos de cadera al ritmo de 'Something 'bout you baby I like', 'Delilah', 'Green green grass of home' o 'It's not unusual'. Tras arrasar los casinos de Las Vegas con espectáculos y discos en directo donde aparecía caracterizado de emperador romano rodeado de bailarinas, no volvimos a saber nada de él hasta que Art Of Noise lo rescató para poner voz a su particular versión del 'Kiss' de Prince, un éxito sin precedentes que hace que aún hoy sean muchos los que piensan que es el intérprete original de la canción. Y otra vez desaparecido.

Una absurda banda sonora y un musical llamado 'Matador' dedicado a la vida de El Cordobés y la vuelta a principios de los 90 con ayuda de pesos pesados de la música de baile, como Youth y Flood en 'The lead and how to swing it', con portada de David Lachapelle. Un disco excesivo en todos los sentidos y que no terminó de llegar ni a su público de toda la vida ni a la cultura de clubs para la que estaba dirigido.

Aparte de éxitos puntuales durante los 90 y principios del 2000 como su colaboración con Mousse T y el celebérrimo 'Sex bomb', un disco de duetos y la aparición junto a Robbie Williams en la entrega de los premios Brit haciendo una selección de la película Full Monty, poco más hemos sabido de él.

Wyclef Jean produjo su antepenúltimo disco, 'Mr Jones', y en 2005 sorprendió con una joya que pasó totalmente desapercibida, una lástima porque su disco a dúo con Jools Holland era una auténtica bomba de buen rockabilly y blues que en sus 20 canciones mezclaba lo mejor de Jerry Lee Lewis, Stray Cats y el estilo de Sun Records. Un disco que con el tiempo merecerá ser recuperado y reivindicado como un disco básico en cualquier colección del que se considere un buen rocker.

Tras él, un absurdo disco de remezclas de las cientos de versiones que ha ido haciendo en su carrera y que es totalmente prescindible. No hay más que oír el rapeado en castellano incluido en 'Do you think I'm sexy?' que parece estar hecho por un alumno de Fernandisco para sentir vergüenza ajena.

La sorpresa llegaba cuando, antes del verano, Tom Jones anunciaba que preparaba nuevo disco, en el que volvía a sus raíces. Llevaba tiempo queriendo hacer un disco que compaginase los sonidos actuales con la elegancia del soul y la música de los 60 que tantos éxitos le dio, pero no encontraba la fórmula. Tuvo que ser su hijo Mark, que hace las funciones de manager desde que falleciera su descubridor Gordon Mills, el que le diera a conocer los trabajos de Mark Ronson, Duffy y Amy Winehouse. Así comenzaba a gestarse '24 hours', con ayuda de Future Cat, el dúo de productores de Lily Allen.

La ansiedad de ver al viejo Tigre de Gales moviéndose en su estilo de siempre fue en aumento con la filtración de noticias sobre la grabación. Versiones de Bruce Springsteen y Tommy James, una canción compuesta por Bono y The Edge de U2... La sorpresa llegó con el vídeo presentación del primer single, una balada mortuoria estremecedora (ver el primer vídeo superior), de las que dejan sin habla, pero ¿dónde estaba el soul y los ritmos bailables?

Hemos tenido que esperar hasta la edición del disco completo para comprobar que una vez más Tom Jones ha dado en el clavo. 'I'm alive' o 'feels like music' son un grito de fuerza que demuestra que el que tuvo, retuvo. Sí, Tom Jones suena actual, pero también tiene el sabor añejo de la música bailable inglesa de los años 60. Al oír '24 hours' te lo imaginas moviendo la cadera como en su mejor época, rodeado de decenas de bailarinas en bikini de lentejuelas, tacones y plumas con todas las estrellas de Las Vegas rendidas a sus pies.

Como bien ha declarado Tom Jones con su nuevo disco, "quiero demostrar que aún tengo fuerza. He querido que mi voz sonara lo más natural posible. La música tenía que ser moderna, pero la voz tenía que ser la mía de siempre." Y está dispuesto a ir a por todas, incluso en el terreno personal. En el disco incluye 'The road', una canción dedicada a su mujer Linda, donde le confiesa su arrepentimiento por todas las infidelidades que ha cometido en los 51 años que llevan de matrimonio y le pide perdón por todo el dolor que le ha podido causar. Tom y Linda llevan casados desde que él tenía 16 años y, como dice en una de las estrofas "mi amor continúa siendo suyo."

El propio Tom Jones considera este nuevo disco como uno de los más personales de su carrera. Ha declarado que lleva los últimos tiempos reflexionando sobre su vida y quería reflejarlo en las canciones, "que el que escuche '24 hours' pueda descubrir quien es realmente Tom Jones."

Actualmente está preparando los conciertos de presentación de '24 hours', y los londinenses se quedaron sorprendidos al encontrárselo hace unos días cantando en la calle como un músico callejero. Teléfonos móviles para registrar el momento y éxtasis colectivo cuando con ayuda de una guitarra acústica la emprendió con 'It's not unusual'. Por supuesto nada de esto era casual. Tom Jones se encontraba realizando una prueba para un programa de tv inglés donde debía conseguir dinero cantando en la calle. La cantidad recaudada, unos 600 euros en el tiempo que duró las cuatro canciones que interpretó ante los asombrados peatones, estaban destinados a una asociación de lucha contra el cáncer.

Otra vez tenemos a Tom Jones en la cresta de la ola, para demostrar que es un buen corredor de fondo en el mundo de la música y un artista de grandes discos. Ya es hora que muchos de los que le conocen sólo por ser el que cantaba la cancioncita que bailaba el primo del príncipe de Bel Air, se enteren que en Tom Jones hay una excelente voz que sigue como el primer día y un gran artista.

*Alejandro Arteche es nuestro colaborador de música.