Los argentinos agotan su paciencia en la odisea cotidiana para conseguir monedas

Como si no fueran suficientes los contratiempos que vienen sufriendo por la recurrente falta de monedas, los argentinos ahora deben formar largas filas en puestos habilitados exclusivamente para cambiar billetes por metálico.El problema se agudizó luego de que la Justicia se incautó de 118 tambores que contenían unos 7 millones de pesos (2,1 millones de dólares) en metálico en poder de una transportadora de caudales denunciada ante la Justicia por acopio de monedas.La falta de suelto en centavos no es ninguna novedad en Argentina y ha dado origen a un mercado negro en el que usuarios de transportes públicos o pequeños comerciantes pagan del 3 hasta el 10 por ciento del valor de la suma de dinero que pretenden cambiar.Para aliviar la situación, el Banco Central ha puesto en circulación 23 millones de monedas a través de la banca pública y habilitó puestos de cambio de billetes por metálico en las tres terminales de ferrocarriles que conectan a Buenos Aires con su populoso cinturón urbano.La semana pasada la transportadora de caudales Maco quedó en el centro de una polémica al ser acusada desde el Ministerio de Justicia de acopiar las monedas que debía distribuir entre numerosas empresas.A partir del decomiso de más de un centenar de tambores repletos de dinero metálico en un depósito de Maco, las concesionarias del metro, el ferrocarril y los peajes de Buenos Aires se quedaron sin suelto, por lo que el último fin de semana fueron muchos los que pudieron viajar gratis.Entre el domingo y el lunes, que fue festivo, se pudo subir al metro de Buenos Aires sin pagar boleto en la mayoría de las seis líneas existentes en la ciudad, ya que sólo se cobró el viaje en las estaciones en las que las taquillas tenían monedas suficientes.El alivio llegó recién el martes, cuando llegó a Metrovías, la concesionaria del transporte subterráneo, el primer envío realizado por el Banco Central desde febrero pasado, consistente en 320.000 pesos (casi 100.000 dólares) en monedas.En los kioscos de golosinas y otros locales, los carteles con la leyenda "No hay monedas" ya son todo un clásico, al igual que la costumbre de muchos comerciantes que, a falta de metálico, entregan caramelos a modo de vuelta. Tiempo: 1:20