Chicas, toca cortarse un pelo

Ella quizás no lo sabe, pero esta vez fue la última en ponerse una tendencia. Vamos, que aunque no lo sepa, no ha hecho de trendsetter sino de seguidora. Victoria Beckham aparecía en la New York Fashion Week con un nuevo y cortísimo peinado. Esta vez, Katie ha conseguido adelantarse a su amiga: ella se había cortado el pelo primero.

Vicky Beckham, siguiendo tendencias.

Algunos tienen el valor de comparar a la Posh con Audrey Hepburn, y bien es cierto que este corte (que se llama pixie, por su similitud con el pelo de los duendecillos) es mucho más favorecedor que éste más irregular y rubio platino, pero desde luego que no hay comparación entre un personaje y otro. Lo que está claro es que, si bien ha llegado la última, ya ha terminado de popularizar el pelo de la temporada: corto, corto y más corto.

Tan tarde ha llegado que otras cuantas ya lucían unos elegantes y favorecedores cortes antes que ella. Una de las usuarias es Hilary Swank, a quien no le resta un ápice de feminidad sino que le da un aspecto más aniñado y divertido. Rihanna también lleva meses con su pelo entre el bob y el pixie, no dejándolo crecer nunca más allá de su barbilla. Rebelde, ella.

Hay que reconocer que llevar el pelo corto tiene grandes ventajas lo mires por donde lo mires. Por ejemplo, si tienes cuatro pelos, como Victoria, puedes conseguir algo de volumen y disimularlo un poco con una cera específica. Si, por el contrario, tienes mucho, moldeándolo también con algún producto puedes obtener distintos looks, por no hablar de que tardarás mucho menos en el proceso de lavado, secado y peinado. Lejos de restar feminidad, si se lleva un buen corte que enmarque el rostro correctamente y una ropa acorde, no hay nada más femenino. Es especialmente favorecedor con flequillo, para los rostros más redondos, y sin él en los más finos y angulosos. Además, en otoño es conveniente dar un buen saneado al pelo, así que un corte de estas características nos permitiría tener en primavera una melenita fuerte y sana.

Podemos afirmar realmente que es un must llevar el pelo corto, porque las mujeres que más salen en los medios, las más imitadas y las más célebres lo lucen así. Veamos… Agyness Deyn, peinado, despeinado, liso o revuelto, lo que tiene en su linda cabecita es un bob. Lo mismo le sucede a Pixie Geldof, en platino y no siempre tan arreglado como debería llevarlo. Uno de mis preferidos es el de la cantante sueca Robyn, con ese magnífico flequillo cortado en diagonal que le enmarca el rostro de esa manera tan especial. Este último es excelente tanto para chico como para chica. La misma Kelly Osbourne, aunque en negro azabache también es usuaria de un versátil corte que tampoco suele dejar crecer mucho más debajo de su oreja. En España, tenemos nuestra trendsetter propia, al menos en peinados (en ropa es otro cantar); hablamos de Bimba Bosé y su sempiterno y andrógino corte de pelo.

El pelo corto no es precisamente una novedad, y hay algunos verdaderamente célebres. ¿Alguien ve a Winona Ryder sin su pixie? Imposible, nada le quedaría tan bien. Recordemos aquella vez que Kate Moss se cortó el pelo y que, francamente, estaba guapísima. Desde luego que mucho menos espelujada que ahora.

Pero fueron los años 60 los que nos ofrecieron los cortes más bonitos y auténticos, comenzando por Audrey Hepburn que, definitivamente, no se parece a Victoria Beckham. En 'La Semilla del Diablo' pudimos ver a la Mia Farrow más guapa y delicada con aquel corte que se hacía en Vidal Sassoon. Combinado con la moda de la época, Mia logró ser todo glamour durante unos años gracias a su pixie. No podemos olvidarnos de la mítica Twiggy, todo un icono de estilo de la cabeza a los pies. Terminamos con otro mito de escuálido cuerpo (no estamos aquí para hablar de desórdenes alimenticios, sino de pelos), Edie Sedwig, musa de Warhol, a quien interpretó Sienna Miller luciendo también mejor que nunca imitando su corte bob.

* Ana Serrano es nuestra colaboradora de moda y belleza.