Miles de personas salieron hoy a las calles de la localidad peruana de Pisco en recuerdo de la tragedia provocada por el terremoto de hace un año, en una jornada pacífica donde el único incidente fue el intento de corte de una carretera que se saldó con seis detenidos.Las movilizaciones se centraron en la lentitud del proceso de reconstrucción tras el terremoto del 15 de agosto de 2007, uno de los más cruentos de los últimos años, que causó 595 muertos y más de 300 desaparecidos, además de dejar 75.000 casas destruidas o dañadas. Pisco fue la ciudad más castigada por ese temblor, que golpeó a la costa del centro-sur de Perú. Aunque los ánimos estaban soliviantados en los pasados días, las únicas protestas violentas se registraron en Chincha (200 kilómetros al sur de Lima). Veinte kilómetros más al sur, en Pisco, las movilizaciones fueron masivas pero pacíficas y se tradujeron en una manifestación de unas ocho mil personas en la plaza de Armas de la localidad, según cifras de la policía, y en numerosos crespones negros en puertas y ventanas en recuerdo a las víctimas del sismo.t:1:41