El "comando Vizcaya" de ETA, desarticulado esta semana por la Guardia Civil, planeaba una cadena de atentados en lugares de ocio, centros comerciales y hoteles de Andalucía a partir del próximo mes de agosto y tenía órdenes de realizar seguimientos al diputado general de Álava, Ramón Rabanera, según se desprende del auto emitido hoy por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, que ha enviado a prisión a siete de sus presuntos miembros.