Cosmética 'fresh' para los días más calurosos

Sólo hay un sistema para luchar contra el calor mediterráneo o mesetario que nos está asolando estos días: huir a la Antártida. Si este sistema no te convence por la carestía del mismo, siempre te queda llenar tu bañera con cubitos de hielo o, mucho más sencillo, recurrir a la cosmética, un término medio de lo más placentero.

Las piernas son una de las partes del cuerpo que más sufren con el calor.

Antes de comenzar, debemos avisar que cualquiera de los productos que aquí proponemos surtirán un efecto mucho más refrescante sobre tu cara y tu cuerpo si los guardamos en la nevera. De hecho, si el calor es verdaderamente insoportable, no está de más guardar las cremas en frío, siempre que te quede un huequito en el refrigerador.

¿Qué parte del cuerpo es la primera en sufrir las consecuencias del calor? Las piernas y pies, que soportan estoicamente todo el peso del cuerpo, mucho más cargado a más de 30ºC. La oferta para ellos es tan ingente como cargados puedan estar en una jornada de julio a las ocho de la tarde.

En The Body Shop te encantará su Gel refrescante de menta para piernas, tobillos y pies, que mejora la circulación y deja una sensación gélida durante un buen rato. Si te lo aplicas recién sacado de la nevera y con los pies en alto, el efecto será total. En Yves Rocher encontramos el Gel Frío Antifatiga para la misma zona, que devuelve la ligereza y elimina el cansancio dejando una sensación de frescor. Porque tú lo vales, L’Oréal también cuida de nuestras sufridas piernas con Perfect Slim Piernas cansadas, un gel que proporciona un auténtico y duradero efecto frío en la zona donde se aplica. Mientras permanece, creerás estar en el cielo. Para las fans de la cosmética venida de las plantas y la aromaterapia recomendamos Circulagel de Decléor, un gel de piernas de color verde muy fresco que estimula la circulación y refresca al instante.

¿Qué hay del resto del cuerpo? Tenemos frescor para todas las partes. Lo más light es aplicarte una rociada de cualquier agua termal bien fría, como por ejemplo la de Avène. Es como una especie de rocío que sólo dura un momento, pero que en los días de calor más insoportable y sin aire acondicionado bien te puede aliviar. Continúa con Jiggle Gel de Benefit Cosmetics, que aporta una sensación extra refrescante y tonificante para todo el cuerpo. En realidad, es un reductor, pero también refresca por lo que matamos dos pájaros de un tiro. La firma griega Korres tiene un producto infalible, su After Sun de Yogur que, en realidad, podemos utilizar siempre que nos apetezca. Tiene un agradable y duradero efecto frío, es apto para el rostro y el cuerpo e hidrata eficazmente. Sobre las quemaduras solares es lo más, pero sobre tu cuerpo incandescente a 42º también.

Refresca también tus axilas con un producto energizante como el Desodorante Cítrico de Weleda; es en spray, muy eficaz contra los malos olores y tiene un ligero aroma a limón. Para terminar de perfumar tu cuerpo de la manera más gélida posible, nada mejor que los Ice Cubes de Kenzo, auténticos cubitos de hielo perfumados (es decir, que tienen que venir directamente de tu congelador) que se derriten en contacto con tu piel caliente. Mientras se van deshaciendo no te podrás encontrar mejor. Por último, la crema helada de KenzoKi, recién llegada, contiene bambú y energiza y refresca todo el cuerpo de manera inmediata.

¿Qué hay del rostro? Con el calor, la piel de tu cara te pide geles, texturas ligeras y fluidas que no te provoquen más brillos ni más sudor. Aveda tiene una Mascarilla facial refrescante con aloe que reduce las deshidrataciones y calma las rojeces. Piensa en tus ojos hinchados después de una noche de calor dando vueltas en la cama… Para combatir la hinchazón hazte con No puffery de Origins, una mascarilla para el contorno de ojos en forma de gel frío (de nevera, también). Se aplica durante unos minutos y se retira con un pañuelo de papel; tus mirada revivirá y notarás un estimulante fresquito en la parte superior de tu cabeza. Muy útil también si sufres una cefalea.

Y si ni con éstas consigues apagar un poco tu calor… Emigra a la Antártida, definitivamente.

* Ana Serrano es nuestra colaboradora de moda y belleza.