El ayuntamiento de Soraluze, gobernado por ANV, ha sido el primer consistorio de Guipúzcoa que ha aprobado hoy, con los votos de PNV, PSE y PP, la denominada "moción ética" que exige la dimisión de los ediles que no condenen la violencia, lo que podría propiciar la futura presentación de una moción de censura.