La familia se ha sentido muy arropada por el calor y las muestras de cariño que les han mostrado sus conciudadanos, horrorizados con el suceso. La conmoción ha sido tal el Austria, que el propio Gobierno ha lanzado una campaña para recuperar su reputación en el extranjero, ya que, en opinión de las autoridades, casos como el de Amstetten y el de Natascha Kampusch, secuestrada durante ocho años, han dañado mucho la imagen exterior del país.